Patín artístico sobr
Deportista | Chile
Tuve como guía una entrenador que generó confianza absoluta en mí, tanto en los aspectos personales como en los objetivos que planteamos. El confiaba al cien por cien en que podría lograrlos, aun cuando debía modificar infinitas cosas de base. Hasta el día de hoy es importante para todas mis decisiones, dentro y fuera de la pista, porque sabe leerme muy bien. Incluso cuando a veces hay cosas que yo no puedo ver. Por otro lado, es indispensable el compromiso para una carrera deportiva. Tiene que ser mutuo, ya que a pesar de que es un deporte individual, siempre a competir entran ambos de cierta forma, aunque solo uno sea visible. En el día a día creo clave eso ¡y la contención! Seguido también de una planificación que debe ser física y mental. Por otro lado, en competencia (y esto lo creo hoy más que nunca) el entrenador debe estar tan convencido y entrenado en cierta forma cómo el deportista. Necesita ser absolutamente preciso en cada indicación y gesto no verbal que da. Dar el sostén necesario (que cambia de deportista a deportista), y también, según el contexto de cada uno, en cada momento debe ser hábil y sensible. Me parece que el compromiso, respeto, y planificación son la base. No se puede pensar en rendir si esta no está. Todo esto es muy significativo hoy para mí que ejerzo ambos roles. (Además de patinadora es entrenadora en el club “Quetzal” en las afueras de Santiago de Chile)